El cuento habla de la importancia de buscar metas que le den sentido a nuestras vidas, ya que creo firmemente una vida sin grandes sueños y metas a la larga terminará siendo una vida vacía y sin sentido.
La verdad es que en el momento en que lo terminé de escribir pensé que jamás nadie más lo leería, porque me pareció francamente malo, pero leyéndolo de nuevo ésta semana pensé que sería bueno publicarlo.
Lo iré publicando por partes para no hacer tan larga la lectura, a pesar de que es un cuento corto.
Sin más preámbulos he aquí la primera parte:
"EL SOLDADO QUE NO TENÍA PORQUE LUCHAR."
Por Rafael Ruiz Velasco Santacruz.
El soldado, que era un valiente joven, un día hacía varios años, cuando era solo un niño se encontraba platicando con su abuelo sobre cosas importantes, o al menos para él lo eran.
- Abuelito, no sé que quiero ser de grande..
- Podrías ser un buen luchador, pequeño. Con ésa energía que tienes¡ Seguro serías el rey de todos los cuadriláteros.
- Si abue, eso me gustaría, pero también quisiera ayudar a los niños pobres.
- Entonces, tal vez deberías ser doctor, ésa sería una buena manera de ayudar a los demás…
Así pasaron horas y platicando con su abuelo se dio cuenta de que quería ser todo:
maestro, astronauta, cirquero, presidente.. . Pero su abuelo ése día le dio el consejo que marcaría su vida de ahí en adelante cuando le dijo:
- Mira pequeño, puedes ser lo que tú quieras, en verdad puedes ser todo lo que tú quieras. Yo solo te puedo aconsejar una cosa, prepárate, entrena, lee y estudia todo lo que puedas para que, lo que sea que decidas ser, lo hagas de la mejor manera. Y la mejor manera de hacerlo es con amor pequeño. Yo, por ejemplo, siempre soñé con ser abuelo, y ahora que lo soy amo tanto serlo que me he propuesto ser el mejor abuelo para ti pequeño.
- Y si que lo eres abuelo- respondió el pequeño sonriendo y dándole un fuerte abrazo.
Hace ya varios años que mi abuelo murió- seguía pensando el soldado que no tenía porque
luchar – pero aún recuerdo lo que me dijo. Ahora estoy listo para ser un buen soldado: he entrenado mis habilidades físicas y técnicas, mi fuerza de voluntad es indestructible, mi disciplina es digna del mejor de los ejércitos y mis ganas de siempre ser el mejor siguen estando intactas. Pero… ¿qué puedo amar? ¿Qué es eso que motivará mi lucha..? ¿Quién será mi enemigo?.
El soldado que no tenía porque luchar estaba sentado observando la ciudad, necesitaba
encontrar ésa razón para luchar, de lo contario, todos sus esfuerzos y su formación serían en vano, y el consejo de su abuelo pasaría a ser solo una fantasía...."
Estén al pendiente de la segunda entrega !!
@twitter rrvs18
(:
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